Aguas mortales (1999)

La pérdida de un hijo es algo que cambia por completo a un padre, por lo general es una herida que nunca termina de ser cerrada pues con su partida se va un pedazo del alma del padre. Y aunque muchos aconsejan seguir adelante, nunca es fácil hacerlo. La película Aguas mortales explora este tipo de trama pero adicionalmente le agrega suspenso y crimen.

Paul Preedy (Daniel Baldwin) era un padre modelo, una persona que solo vivía para cuidar a sus hijos, aunque el siente que fallo como padre. Ha pasado un año desde que su pequeña hija falleció, dejando al padre en una tristeza absoluta.

Este recibe una invitación para asistir a un reencuentro con antiguos compañeros del colegio secundario. Una reunión que no motiva mucho a Paul, pero aún así decide asistir a la misma en compañía del hijo que le queda.

Al llegar, descubre que sólo dos personas más han sido invitadas y comienza una nueva trama donde el pasado, sentimientos ocultos y un terrible secreto se revela en esta inusual reunión.

Aguas mortales es una película que cuenta con la dirección de Murray Battle. Una obra que pasó desapercibida por la crítica y los medios especializados. Lo único importante de la trama fueron sus actores que hacen lo posible por mantener la expectativa en el desarrollo de la misma, tarea que fracasan.

El reparto principal está formado por Daniel Baldwin, Leslie Hope, Dean Stockwell, John Neville, Roberta Maxwell, entre otros. Por el tipo de contenido Aguas mortales resulta apta para mayores de 13 años.